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domingo, 28 de julio de 2013

Ballet cubano de luto con muerte del maestro Fernando Alonso


Fernando Alonso

    El destacado bailarín, maestro y director de compañías de ballet cubano Fernando Alonso Rayneri, acaba de fallecer en La Habana a los 98 años de edad.
   Nacido el 27 de diciembre de 1914, Fernando Alonso fue uno de los fundadores del ballet cubano y el maestro por excelencia de la escuela cubana de ballet.
   De procedencia burguesa, se desarrolló en un ambiente donde se cultivaban la música y el deporte. Su madre provenía de una familia austro-italiana y era pianista concertista, aunque no ejerció su vocación debido a los prejuicios de la época. Casada en segundas nupcias con un contador de una empresa norteamericana, tuvo dos hijos; Fernando fue el mayor.
   En su niñez recibió clases de violín, estudió la enseñanza primaria en un colegio católico, y la secundaria en Alabama, Estados Unidos, donde practicó el fútbol americano y la gimnasia.
   Cada año pasaba sus vacaciones de verano en La Habana. En diciembre de 1931 asistió a la primera función de la Escuela de Baile de la Sociedad Pro Arte Musical y quedó prendado del ballet, que, según él: "recogía la música y el ejercicio físico, sus dos pasiones".
   Al año siguiente asistió a la presentación de "La bella durmiente del bosque", y quedó impresionado por la joven bailarina Alicia Martínez (Alicia Alonso). Su afición por la danza creció cuando su hermano menor, Alberto Alonso, ingresó en Pro Arte, poco tiempo después.
   En 1935, culminados sus estudios secundarios en Estados Unidos, regresó a La Habana y decidió comenzar estudios de ballet en la Escuela de la Sociedad Pro Arte Musical, presidida entonces por su madre. Allí realizó su debut escénico al año siguiente con el ballet "Claro de luna", junto a Alicia Alonso, y entre ambos surgió el amor de inmediato.
   De ese debut se hizo eco la prensa cubana, quien lo describió como un joven esbelto, fuerte y con grandes facultades como bailarín.

   A pesar de que su empleo en una oficina comercial británica le producía dividendos, decidió abandonar la estabilidad laboral para dedicarse completamente a la danza. Regresó a Estados Unidos para preparar su matrimonio con Alicia, efectuado en 1937 en la ciudad de New York. Al año siguiente nacería Laura, la única hija de ambos.
   En Estados Unidos continuó estudios en la academia del bailarín ruso Mijail Mordkin y bailó con su compañía en giras por el país. Actuó además en Broadway en las comedias musicales Great Lady y Stars in Your Eyes, entre los años 1938 y 1939, junto a la actriz y cantante Ethel Merman, la ballerina Tamara Tourmanova y los entonces jóvenes bailarines Nora Kaye, Maria Karnilova, Donald Sadlres y Jerome Robbins, quienes fueron muy famosos años más tarde.
   También realizó estudios en la School of American Ballet con los maestros George Balanchine, Alexandra Fedorova y Anatole Oboukoff, e integró en 1939 el American Ballet Caravan, en el cual bailó en las obras de Lew Christensen y Eugene Loring Charade y Billy the Kid. Al año siguiente integró el elenco del Ballet Theater of New York (hoy American Ballet Theatre), llegó a alcanzar el rango de solista e interpretó como tal "Pedro y el lobo", de Adolf Bolm y "Tres vírgenes y el diablo", de Agnes de Mille.
   Del mismo modo, interpretó el Mercuccio, en "Romeo y Julieta", de Anthony Tudor, y participó en los ballets de Balanchine, Fokine, Dolin, Nijinska, Massine y Robbins.
   Su interés por desarrollar el ballet en Cuba lo hacía regresar a su país cada año, para colaborar con el Ballet de la Sociedad Pro Arte con la interpretación de papeles principales en "Las sílfides" y "Petroushka", de Mijail Fokine; "Ícaro", de Serge Lifar; "Forma, Sombras y Antes del alba", de Alberto Alonso Rayneri.  
   Para la Sociedad montó en 1945, junto a su entonces esposa, Alicia Alonso, el ballet "Giselle", representado en el teatro Auditorium (hoy Teatro Auditorium Amadeo Roldán), en el que interpretó el rol masculino principal.
   Pero la empresa más difícil y heroica en la vida de Fernando Alonso se inició cuando, en unión de Alicia y Alberto, fundó, el 28 de octubre de 1948, el Ballet Alicia Alonso (hoy Ballet Nacional de Cuba), que dirigió hasta 1974.
Fundador de la Escuela Nacional de Ballet en 1962, fue su director hasta 1968.  
   En ella preparó las bases de la metodología de la enseñanza del ballet cubano y sus primeros planes de estudios, en coordinación con Alicia Alonso y bailarines del Ballet Nacional de Cuba, quienes, gracias a sus enseñanzas, se hicieron también maestros.
   Esa Escuela tuvo como antecedente la creación, en 1950, de la Academia de Ballet Alicia Alonso, lugar de los inicios del propio Fernando como maestro y pedagogo, y formadora de la primera generación de bailarines cubanos, fundadores de la actualmente reconocida escuela cubana de ballet.
   Ese trabajo coronó sus aspiraciones fundamentales y produjo el desarrollo de ese peculiar modo de enseñanza que hoy es la admiración de todo el mundo.
Fernando Alonso ha impartido clases en Rusia, Francia, Bélgica, Bulgaria, Canadá, Estados Unidos, México, Colombia; en las más importantes compañías, escuelas y academias.
   En 1975 fue nombrado Director del Ballet de Camagüey y en 1992 de la Compañía Nacional de Danza de México, país en el cual permaneció hasta 1998. Allí alternó su trabajo de director de compañías con el de maestro de diversas instituciones, como el Instituto Nacional de Bellas Artes y la Universidad Autónoma de Nuevo León.

Su última actuación
Como bailarín, su última actuación, la realizó en el año 1956 en una función pública en el Stadium de la Universidad de La Habana, en la interpretación del rol masculino central de "Las sílfides", aunque hizo otras presentaciones como bailarín demi caractere en el personaje de Hilarión, de "Giselle'.
   Esta interpretación quedó recogida por el Instituto Cubano de Arte e Industria Cinematográficos (ICAIC) de Cuba, en el filme homónimo del año 1963, repetido en París, en 1966, en el IV Festival Internacional de Ballet de los Campos Elíseos, donde el Ballet Nacional de Cuba ganó el Gran Prix de la Ville, siendo Fernando Alonso director de la compañía.

Reconocimientos y premios
   Ha recibido innumerables premios y distinciones en Cuba entre los que destacan el título de Doctor Honoris Causa del Instituto Superior de Arte de La Habana, la Orden Félix Varela de Primer Grado, y el Premio Nacional de Danza, en Cuba.
   También mereción  laMedalla Conmemorativa del Bicentenario del Teatro Bolshoi de Moscú, en Rusia, y el Premio Benois de la Danza, también en la capital rusa.
   Con más de noventa años de edad, el maestro Fernando Alonso siguió impartiendo clases en la Escuela Nacional de Ballet en Cuba y en centros de ballet de América y Europa como profesor invitado.

Tomado del sitio digital Ecured

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